De acuerdo a un reciente artículo de Insight Crime, algunas de las bandas criminales más peligrosas de toda Venezuela, incluyendo carteles y las llamadas “megabandas”, han creado organizaciones comunitarias y fundaciones para tener mayor control de las diferentes barriadas populares y territorios en los que operan dentro del país. Se trata de un caso más que preocupante, ya que esto solo nos muestra la manera en que estas bandas criminales no solo han logrado incrementar su poder sino también mejorar sustancialmente sus métodos.
Lógicamente, se trata de una noticia de suma importancia, sobre todo si consideramos que Insight Crime es uno de los medios que ha brindado mayor cobertura al tema del crimen organizado en Venezuela. Sobre todo desde el ascenso del dictador Nicolás Maduro, momento en el cual los vínculos entre las peores organizaciones criminales y el chavismo eran imposible de soslayar.
Según este medio, una de las estrategias más eficientes que estas bandas criminales han puesto en práctica para acentuar su poder y control, ha sido el hacer uso de estas organizaciones comunitarias y fundaciones para hacer donaciones y suministrar tanto comida como medicinas a la población de las barriadas populares donde operan.
Básicamente, se trata del típico caso en el que, en lugar de buscar ganarse los corazones de la gente a quien se tiene oprimida, lo que se busca es llenar el estomago para hacerse con su lealtad incondicional. Todo esto con el fin de poder acentuar tanto su poder y control de una manera en la que no haga falta mayor derramamiento de sangre, el cuál ha sido el modus operandi usado por estas bandas desde hace años.
El incuestionable poder de las bandas criminales en Venezuela.
En Venezuela, para nadie es un secreto que estas bandas criminales, si bien no son tan conocidas a nivel regional, son lo suficientemente poderosas como para compararse a las fuertes de países como México o El Salvador. Sin embargo, tampoco es secreto que estas bandas criminales han llegado a amasar esta increíble cantidad de poder por la pobreza extrema que existe en las barriadas populares donde estas operan, así como por la escasa presencia del estado venezolano en dichas zonas.
El primero de estos dos elementos es fundamental, ya que las carencias terminan facilitando la dependencia de muchos de quienes viven en estas zonas con las bandas criminales que las controlan, tomando en cuenta que son estas la autoridad a la cuál se le rinde cuenta. Por otro lado, si consideramos la violencia que estas organizaciones criminales suelen ejecutar, la pobreza extrema les resulta una oportunidad, ya que de esta manera se les hará más fácil el reclutamiento de “soldados.” Esta fue la estrategia usada específicamente por Pablo Escobar en los barrios de Medellín.
Por supuesto, la escasa presencia del estado también resulta esencial, tomando en cuenta que se trata del típico caso de un vacío de poder que eventualmente es aprovechado por las facciones más violentas, para ocupar espacios e imponer su ley. De hecho, en el caso de Venezuela todo es aún más delicado, si tomamos en cuenta la relación entre muchas de estas bandas con el régimen, y la forma en que este les permite operar libremente siempre y cuando les garantice el control político de estas zonas.
Ya por otra parte, vale la pena señalar que según Insight Crime, otra de las estrategias empleadas por estas bandas criminales para acentuar su poder y control es a través de la violencia extrema, incluyendo actos como los desplazamientos forzados, la amputación de miembros e incluso las masacres.
Así mismo, este medio informó que algunas de las organizaciones y figuras criminales que estarían haciendo uso de estas estrategias, junto a la creación de organizaciones comunitarias y fundaciones, serían El Tren de Aragua, Carlos Enrique Gomez, la Organización R e incluso el sindicato Barrancas.